El régimen político más caro para la crisis económica más grave. Unas ideologías alimentadas por cada uno de los diecisiete sistemas educativos.

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Los nacionalismos son un grave problema que tenemos en nuestro país y que parece haberse adormecido, solo parece, en estos días de pandemia. Todas las estructuras sociales que nos permiten sobrevivir de manera supuestamente civilizada favorecen, y hasta promueven, estos nacionalismos. A los españoles, el régimen autonómico nos está costando mucho dinero. Y cabe preguntarse quiénes son los que tienen verdadero interés en este sistema de administración del Estado. ¿Son los administrados o los administradores? La crisis económica, que no ha hecho ni comenzar, va a empobrecer el país como nunca antes se había empobrecido desde la guerra civil del 36. Sin embargo, nuestro sistema político y de administración pública es el más caro del mundo. No sé si los administrados somos conscientes de esto. A pesar de que el dinero sale de nuestros bolsillos.

El sistema educativo contribuye como ningún otro instrumento a que estos administradores feudales que saquean y expropian nuestro trabajo ganen cada vez más y más autonomía. Unas autonomías y unos administradores más que otros, pero todos intentando sacar su buena tajada. De todo esto vamos a hablar hoy. Pero lo voy a hacer a través de una persona que lo dice mucho mejor que yo pudiera hacerlo. Se trata de María Elvira Roca Barea.

Esta mujer nos está abriendo los ojos a muchos españoles que desconocíamos las razones por las que ocurrían las cosas que ocurren en nuestro país. No podíamos explicarnos que nuestro país fuera distinto a los demás, como así nos habían hecho ver. Nuestros profesores de historia, los de ayer y los de hoy, nos contaban cosas, que también podíamos leer en los libros de texto, y que no terminaban de cuadrar. María Elvira nos cuenta la historia comparada y los ojos se nos abren hasta brotar las lágrimas. No nos merecemos a los Pérez Reverte de turno, ni por supuesto a las élites políticas que nos llegaron con los Borbones, y hasta nuestros días.

Los nacionalismos, una sociopatía transversal
A los administradores del nacionalismo les da igual la historia. El pueblo que les secunda lo engulle todo, y tampoco le interesa especialmente la historia. Lo de que “España nos roba” lo tienen esculpido en su pétreo intelecto. Ya no hay forma de pulir ese marmóreo cerebro deforme y pesado.

Hoy traigo hasta aquí un breve extracto de su último libro “Fracasología”. Cada capítulo es un gozo de lectura recomendable para todo aquel que tenga que ver algo con España. No es extraño que los que sienten odio por nuestra Patria tiren por tierra el trabajo erudito de Roca Barea; que, por cierto, se resiste a ser ubicada en ideología alguna. Y me parece muy bien, porque esto no va de ideologías, como muy bien ella misma se esfuerza en explicar. Ha habido quien ha querido crucificarla, mucho más si forma parte de esas élites que María Elvira pone en acreditada evidencia.

En otros audios, muy interesantes también, encontrareis relatos históricos que rebaten las mentiras en las que se fundamentan los nacionalismos. Este no va de eso. En verdad, a los administradores del nacionalismo les da igual la historia. El pueblo que les secunda lo engulle todo, y tampoco le interesa especialmente la historia. Lo de que “España nos roba” lo tienen esculpido en su pétreo intelecto. Ya no hay forma de pulir ese marmóreo cerebro deforme y pesado.

Me resisto a interrumpir la lectura para realizar mis comentarios, no quiero provocar interferencias. El extracto que traigo comienza emitiendo su opinión, de la que yo participo sólo en parte, sobre la innecesaria publicidad mediática que se da a los nacionalismos. Juzga que es excesiva y que “con la mitad de tiempo basta y sobra, y queda la audiencia perfectamente informada”. No estoy seguro del todo, pero María Elvira tiene un criterio mejor formado que el mío.

Inmediatamente pasará a citar las cuatro fuentes de las que se alimenta el nacionalismo. ¡Impresionante! No me entretendré en profundizar en ello, el audio sería muy largo.

Más tarde se refiere a las autonomías y el culto al hecho diferencial. Se entretiene analizando someramente el caso andaluz, que a ella le toca de cerca. No tiene desperdicio, seguro que disfrutáis. Tanto como rabiarán los nuevos señores feudales, aupados por las hordas medievales insufladas de espíritu nacionalista.

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